Más represión: La Asociación Médica Americana pide que se censuren las críticas al ‘cambio de sexo’ infantil

Share on facebook
Share on twitter
Share on linkedin

Hospitales y médicos están haciendo su agosto atiborrando a menores de edad confusos de arriesgados tratamientos hormonales, en el mejor de los casos, y sometiéndoles a castraciones y mastectomías, en el peor, todo con el aplauso de la mayor parte de la clase política.

Cualquier reacción a esta aberración ha topado con los intereses de la clase médica, buena parte de la cual ve en la promoción de la confusión de géneros a edades especialmente sensibles una verdadera gallina de los huevos de oro, ya que convierte a los menores en clientes de por vida. 

Pero ahora se está dando un paso más, el periodista de investigación Christopher Rufo anunció el lunes desde su cuenta de Twitter que la Asociación Médica Estadounidense está pidiendo a las grandes empresas tecnológicas y al Departamento de Justicia que censuren, eliminen, investiguen y procesen a los periodistas que cuestionen la ortodoxia de las cirugías radicales de género para menores, argumentando que la crítica pública es ‘desinformación’».

No es ninguna sorpresa: en los dos últimos años hemos asistido a una oleada de censuras y silencios sin precedentes en EEUU. Se ha sabido, por ejemplo, que el año pasado, la Asociación Nacional de Juntas Escolares, el Departamento de Justicia y el FBI trabajaron juntos para etiquetar a los padres que se oponían a la teoría crítica de la raza como «terroristas domésticos».

Y ahora le toca el turno a esta peligrosa locura que condena a menores de edad a una vida de tratamientos irreversibles.

El espectro político va posicionándose ante este abuso infantil mediado por los médicos, y así, mientras varios gobernadores republicanos han aprobado o preparan leyes para prohibir estas prácticas en menores, por otro lado, entre los demócratas, se da la reacción contraria, una cerrada defensa de lo indefendible: que un niño puede decidir que es del sexo contrario del biológico y comprometer el resto de su vida en esa decisión.

Así, el sobrino de Nancy Pelosi y gobernador de California, Gavin Newsom, que ha confesado recientemente que aspira a la Presidencia de Estados Unidos, ha declarado su estado «santuario» para niños transgénero y sus familias. La semana pasada promulgó un proyecto de ley con este objeto, para proteger a los jóvenes trans menores de 18 años y a sus familias del enjuiciamiento penal si viajan al Estado Dorado para obtener «atención médica de afirmación de género», que puede incluir bloqueadores de la pubertad, hormonas y cirugía que muchos críticos consideran una forma de abuso infantil.

(Con información de La Gaceta)

Deja un comentario