Marruecos se frota las manos: es el gran beneficiado del choque de Sánchez con Trump

Marruecos es el beneficiado del choque de Sánchez con Trump

Diplomacia, cooperación militar militar y acuerdos económicos; esas son las tres patas de una relación bilateral, y España las ha echado por tierra.

Mohamed VI se reivindica como un socio estratégico en la región, en un equilibrio que abunda en las relaciones diplomáticas, militares y comerciales

“Las amenazas, con Donald Trump, son hechos”. Esa es la máxima que impera en esferas diplomáticas y que tras la Cumbre de la OTAN adquiere una relevancia sustancial. Porque el presidente de Estados Unidos ha puesto a España en el punto de mira -ya habla de guerra comercial- tras certificar que Pedro Sánchez su negativa a alcanzar el 5% del PIB en defensa. Y en este contexto, Marruecos es el beneficiado del choque de Sánchez con Trump para incrementar la influencia de Washington en la región, en detrimento de las deterioradas relaciones con España.

Los acontecimientos de la Cumbre de la OTAN son de sobra conocidos. Pedro Sánchez se negó antes y después de la Cumbre a alcanzar el 5% del PIB en defensa. Y Donald Trump sostiene que se encargará personalmente de que España pague; o, de lo contrario, lanzará una ofensiva arancelaria total.

Diplomacia, cooperación militar militar y acuerdos económicos son las tres patas de una relación bilateral entre países y que España las ha echado por tierra con EEUU. Veamos la situación actual:

Diplomacia: Marruecos se afianza como socio prioritario

Mientras España destruye décadas de cooperación con su aliado histórico, la relación bilateral entre Marruecos y Estados Unidos avanza sin freno para consolidar a Rabat como el nuevo socio prioritario de Washington en el norte de África.

Mohamed VI ha sabido aprovechar cada vacío dejado por el desgobierno de Pedro Sánchez. La ruptura política, diplomática y estratégica entre España y Estados Unidos no ha pasado desapercibida. Y en ese contexto, Marruecos se posiciona como actor clave.

La relación bilateral entre Marruecos y Estados Unidos no nace ahora. Se viene consolidando desde que Donald Trump reconoció la soberanía marroquí sobre el Sáhara Occidental. Esa decisión, lejos de ser revertida, fue mantenida por Joe Biden, demostrando continuidad en el respaldo estadounidense a los intereses de Rabat.

Marruecos no es solo un aliado árabe estratégico. Es también uno de los primeros países musulmanes que se integró en los Acuerdos de Abraham, reconociendo a Israel y situándose como bastión contra el islamismo radical. Esta decisión lo convirtió automáticamente en pieza clave para la estabilidad regional, y en favorito de Washington.

Esa solidez diplomática que hoy tiene Marruecos contrasta con la precariedad absoluta del Gobierno español, aislado internacionalmente, deslegitimado por sus pactos con golpistas y comunistas, y enfrentado incluso con sus propios aliados de la OTAN.

Cooperación militar: armas, bases y maniobras

Uno de los pilares de la relación bilateral entre Marruecos y Estados Unidos es la cooperación militar. Desde 2018 hasta 2023, Marruecos ha solicitado a Washington compras de armamento por más de 13.000 millones de dólares. Entre el material adquirido se incluyen misiles, cazas, helicópteros y tanques.

Además, Marruecos acoge cada año los ejercicios African Lion, donde miles de tropas norteamericanas participan en simulacros con los ejércitos africanos aliados. Estos ejercicios no son simbólicos: consolidan relaciones militares, prueban logística y muestran músculo.

Mientras tanto, en España crece el rumor del traslado de las bases de Rota y Morón a Marruecos. Aunque la cúpula militar lo niega, el interés del Reino alauí es evidente. Lo dicen sus hechos, no sus comunicados.

El error histórico de romper con Estados Unidos podría dejar a España sin presencia estratégica en el sur, mientras Marruecos se convierte en custodio militar del Mediterráneo occidental.

Guerra comercial: otro terreno donde Marruecos gana

La tercera pata de la relación bilateral entre Marruecos y Estados Unidos es económica. Marruecos compite con España en sectores clave como el agroalimentario, textil y manufacturas. Con la amenaza de aranceles de Trump a las exportaciones europeas, el eje del comercio se mueve.

Y Marruecos se ofrece como alternativa natural. Cercanía geográfica, mano de obra barata y estabilidad institucional –por débil que sea– convierten al país alauí en una plataforma perfecta para el capital americano. España, mientras tanto, pierde competitividad y se enreda en una política fiscal suicida y burocrática.

En términos geoestratégicos, es una cesión de soberanía encubierta. Washington reconfigura su presencia en la región, y Rabat se postula como nuevo centro de operaciones.

Un riesgo inminente para Ceuta, Melilla y Canarias

La pérdida de influencia española en la región tiene consecuencias reales. No es una cuestión de diplomacia simbólica. Si Estados Unidos traslada sus bases militares a Marruecos, ¿quién garantizará la defensa de Ceuta, Melilla o Canarias? El riesgo es claro: cuando las bases de Rota y Morón se trasladen a suelo marroquí –cuestión de tiempo–, Ceuta, Melilla y Canarias quedarán al alcance del expansionismo alauí.

La relación bilateral entre Marruecos y Estados Unidos ofrece al reino alauí no solo armas y dinero, sino legitimidad internacional. Con el paraguas de Washington, Rabat puede avanzar en su agenda expansionista sin freno.

Hoy, España ha perdido el respeto internacional. Y los enemigos de nuestra soberanía lo saben. Marruecos avanza en su influencia, mientras el Gobierno socialista destruye las alianzas tradicionales. No hay excusa para esta claudicación estratégica.

La relación bilateral entre Marruecos y Estados Unidos se fortalece porque Marruecos defiende sus intereses. España, por el contrario, los abandona.

Hoy, la diplomacia no puede ser espectáculo ideológico. Debe ser una herramienta de soberanía. España debe volver a ser actor internacional. No lacayo de Marruecos ni peón de las élites globalistas.

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1 comentario en «Marruecos se frota las manos: es el gran beneficiado del choque de Sánchez con Trump»

  1. El chantaje marroquí dura más de 50 años: pesca, inmigración legal, inmigración ilegal, droga del Rif, droga de Sudamérica, ayudas al desarrollo, frutas y verduras, menas q hace años que cumplieron 18 años , lobbies promarroquíes con expoliticos españoles maniobrando, oenegés que viven de la inmigración ilegal y subvenciones… Y saben que Usa entre ellos, y nosotros, les apoyará a, ellos (es así desde mediados siglo XX)…

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