El CO2 lo absorben los mares y océanos desde siempre, los expertos calculan que es una cuarta parte de lo que se emite. Los países que quieren un mundo mejor buscan obtener la energía lo más limpia posible, no sólo con el CO2, sino también con el metano, el NO2 que se emite en gran cantidad en la obtención de energía en todo en el mundo. La utilización de la energía nuclear lo evita en su totalidad; por ejemplo, el 60% de emisiones libres de gases de efecto invernadero en EEUU lo es debido a las centrales nucleares, lo que significa, como publica la IAEA-OIEA (International Atomic Energy Agency – Organización Internacional Energía Atómica) 809,3 miles de millones de kilovatios hora (kWh). En otros países también lo hacen; en miles de millones: Francia 382,4 kWh, China 330,1kWh, Rusia 195,5 kWh, República de Corea 138,8 kWh… algo que todos tienen también en común es que están implementando su potencia nuclear. A tener en cuenta que en el periodo de 1970 hasta el 2005, en la UE se cuentan cuatro accidentes en la industria del carbón y 942 muertos; en la industria del petróleo, 64 accidentes y 1.236 muertos, y en GLP (gas licuado de butano y propano), 559 muertos. Podríamos seguir y aumentaría desgraciadamente la cantidad de muertos. En la industria nuclear de la UE no hubo ningún muerto.
Se calculan en unas 30.000 las cabezas nucleares, de las cuales 5.000 en misiles preparados para lanzar, más las que se está Reino Unido o Irán. No hay temor de que haya un conflicto nuclear, todos saben que de producirse significaría la destrucción de los países. Todos conocen los misiles con cabezas nucleares que les apuntan y los tienen controlados.
La nuclear no sólo se utilizada para la guerra, muy conocida por su desgraciado estreno en Hiroshima y Nagasaki. Ahora se usa para ayudar todo lo posible a la humanidad. Tenemos muchos ejemplos en Latinoamérica, Asia y África, donde se utiliza entre otras cosas para erradicar algunas enfermedades, paliar el hambre o buscar agua en lugares inhóspitos. También en todo el mundo para la medicina: para el cáncer, haciendo que la radioterapia solo afecte a las células malignas; para el corazón con el Spect (tomografía computarizada) o Gammagrafía con la utilización de radio isótopos de tecnecio.
