Sorprendidas, avergonzadas, atónitas, incrédulas… Distintas asociaciones feministas describen con estas palabras la sensación de sus integrantes al enterarse de la renuncia del PSOE a las enmiendas a la ‘ley trans’ promovida por Irene Montero. «Es una vergüenza política», asegura una de las impulsoras de Femes, la Asociación Española de Feministas Socialistas. «La deriva del PSOE con la ‘ley trans’ es de vergüenza. Ha estado mareando la perdiz durante meses, pero al final se ha acabado retratando. Me avergüenza ese partido», insiste. «El PSOE se ha plegado a las teorías de un socio minoritario y a los discursos de la doctrina queer deshaciéndose de todo su legado feminista. Es realmente indigno», añade.

La asociación a la que pertenece, Femes, ve como «una anomalía democrática sin precedente conocido que en la elaboración y tramitación del proyecto de ley transgénero se haya impedido el debate democrático y negado de modo sistemático la interlocución con el feminismo organizado».

Feministas llaman a salir a la calle

Por ello, la entidad, junto a otras tantas, ha convocado una manifestación «nocturna» el próximo 16 de diciembre en la plaza de las Cortes, en Madrid. «Rechazamos la autodeterminación del sexo registral o creencia en la autodeterminación de género sin garantía jurídica alguna y rechazamos el proyecto de ‘ley trans’ que hace retroceder en derechos a las mujeres y pone en riesgo de salud extrema a menores, adolescentes y juventud afectados por el fenómeno de la disforia de género de inicio rápido, permitiendo un atentado a su integridad física y psicológica», arranca el manifiesto que invita a participar en la concentración.

«Rechazamos la tramitación urgente de un proyecto de ley sin un análisis sosegado que muestre las consecuencias que a futuro se pueden derivar de la negación del ‘sexo’ como categoría biológica y jurídica relevante y sustantiva a toda persona. Rechazamos la autodeterminación de género o creencia subjetiva de que el sexo se elige libremente que a lo único que nos está llevando es a reforzar los estereotipos y patrones culturales más arcaicos relativos a la feminidad y la masculinidad», añaden.  Para las convocantes de la protesta, la normativa impulsada por Irene Montero supone «una ley mordaza, homófoba y misógina».

La Alianza Contra el Borrado de las Mujeres coincide con las citadas reivindicaciones. «Es sorprendente que, siendo conscientes de que la ley es dañina para los menores como queda patente a través de su enmienda, el PSOE no sea capaz de mantener la defensa de esa posición. Sigue enrocado en ignorar todos los elementos conflictivos de la norma que colisionan con derechos de las mujeres… Es desconcertante«, denuncian.

Y se pregunta: «¿Cómo se puede defender una norma que sabes que es perjudicial para los menores?«. «No me cabe en la cabeza», reconoce. La Alianza Contra el Borrado de las Mujeres también ha querido mostrar su decepción con la socialista Carmen Calvo, que terminó votando a favor de la polémica ley al considerar que la nueva norma «contiene artículos contrarios a la Ley de Igualdad» y «permite que cualquiera pueda decidir, solo con su deseo, qué sexo pondrá en su DNI». «Vergüenza», resume la organización.

(Con información de VozPopuli)