Continua la deserción globalista: JP Morgan, Goldman Sachs, Morgan Stanley, Citi y Bank of America abandonan la ‘alianza climática’ de la ONU

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El proyecto Net-Zero Banking Alliance (NZBA) de la ONU podría estar herido de muerte tras los abandonos de las grandes firmas bancarias globalistas

El proyecto Net-Zero Banking Alliance (NZBA) de la ONU, destinado a alinear las operaciones bancarias con el objetivo de cero emisiones netas para 2050, podría estar en grave peligro tras la salida de varias de las principales entidades financieras estadounidenses. La decisión de JP Morgan Chase de retirarse de esta alianza, anunciada el 7 de enero, se suma a las deserciones previas de otros gigantes de Wall Street como Goldman Sachs, Morgan Stanley, Citi y Bank of America.

Este movimiento refleja un alejamiento de los compromisos climáticos, especialmente en el contexto de la próxima administración de Trump que podría revertir las políticas ambientales. Las élites globalistas parecen estar posponiendo su radicalismo climático, esperando que termine la era Trump y evaluando las consecuencias económicas de sus acciones.

El NZBA, creado en 2021 bajo el amparo de la ONU, fue recibido con entusiasmo inicial por las principales instituciones financieras globalistas, que se comprometieron a reorientar sus inversiones para lograr la neutralidad en emisiones. Sin embargo, las exigencias crecientes y el impacto económico percibido han llevado a muchas de estas entidades a reconsiderar su participación.

El proyecto Net-Zero de la ONU herido de muerte

En marzo de 2024, el fondo de inversión más grande del mundo, BlackRock, el ariete del globalismo, marcó el comienzo de esta tendencia al desvincularse del proyecto Climate100+, una iniciativa que presionaba a las empresas para reducir sus emisiones. BlackRock argumentó que las exigencias eran estridentes y poco realistas, una postura que también adoptaron State Street y PIMCO. Este desencanto también fue compartido por JP Morgan Chase, que respaldó esta decisión junto con otros grandes jugadores.

El retiro de los principales bancos de Wall Street representa un duro golpe para el NZBA. Sin el respaldo de JP Morgan Chase, Goldman Sachs, Morgan Stanley, Citi, Bank of America y Wells Fargo, la iniciativa pierde gran parte de su legitimidad y fuerza en la industria financiera.

Estrategia de espera

Los expertos señalan que las élites globalistas están optando por una estrategia de espera, confiando en que un cambio en el liderazgo político de Estados Unidos podría revivir y fortalecer estas iniciativas. Para estas élites, esperar cuatro años no es un gran sacrificio si con ello aseguran una implementación más efectiva y menos disruptiva de sus objetivos climáticos.

La salida de estos bancos también podría estar motivada por presiones internas y externas, incluidas las críticas de accionistas y clientes preocupados por los costos asociados a las políticas climáticas. En este contexto, la estrategia parece ser reducir riesgos mientras se mantiene una posición flexible ante futuros cambios regulatorios y políticos.

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