En el mes de julio, las importaciones de este combustible provenientes de Rusia se dispararon un 141%, hasta alcanzar los 5.317 GW/ hora, según la estadística publicada hoy por la Corporación de Reservas Estratégicas de Productos Petrolíferos (Cores).
En total, España compró a Rusia el 14% del gas de importó en julio, y que ascendió a 36.606 GW/hora, un 26,8% más que en julio 2021. En el acumulado del año, las importaciones de gas ruso ascendieron hasta julio hasta los 29.333 GW/hora, un 24,2% más que en el mismo periodo del ejercicio anterior.
El incremento de gas ruso importado en julio no implica necesariamente que España haya seguido firmando contratos con este país tras la invasión de Ucrania y la aplicación de las sanciones. No obstante, y según datos del Centro de Investigación sobre Energía y Aire Limpio (CREA, por sus siglas en inglés), España se sitúa como el tercer mayor importador de gas natural licuado (GNL) ruso a nivel mundial desde el comienzo de la guerra, tras Francia y Bélgica, ya que desde el 24 de febrero al 24 de agosto, nuestro país pagó más de 1.500 millones de euros.
Las importaciones desde Rusia colocaron a este país en julio como el tercer mayor suministrador de gas de España, sólo por detrás de Argelia y Estados Unidos. El país magrebí (23,4%) fue el que más gas vendió a España, 8.572 (GW/hora). Y ello a pesar de que el suministro, todo a través de gasoducto, se desplomó un 42% como consecuencia de la crisis abierta entre ambos países por el cambio de postura del Gobierno de Pedro Sánchez sobre el Sáhara Occidental. Por el contrario, las compras de gas natural licuado (GNL) a Estados Unidos se dispararon un 220%, hasta los 8.530 GW/hora, representando el 23,3% del gas comprado por España. El gas estadounidense se está convirtiendo poco a poco en el sustituto del argelino. En lo que va de año, las compras de GNL a EE UU alcanzan los 86.687 GW/hora tras dispararse un 284,7%, mientras que las de Argelia suman 64.635 después de hundirse un 41,9%.
El crecimiento de las importaciones de gas desde Estados Unidos no es, sin embargo, el más acusado en lo que iba de ejercicio hasta junio. En su estrategia para diversificar sus fuentes de suministro, España ha disparado también las compras a Egipto, que crecieron en los siete primeros meses del año un 409,2%, hasta alcanzar los 9.245 GW/hora. En este plan de diversificación también ha cobrado especial relevancia Nigeria. Las compras de gas a este país se dispararon un 68,8% hasta el mes de julio, hasta sumar 37.355 GW/hora.
(Con información de la Razón)
