Más de 240.000 personas salieron a protestar este sábado-según el Ministerio de Sanidad (muchos más para los organizadores- en diferentes ciudades de Francia por cuarto fin de semana consecutivo contra las medidas de control de covid-19, como el pase sanitario y la vacunación obligatoria para el personal sanitario
Los opositores al certificado sanitario en Francia y al conjunto de medidas adoptadas por el Ejecutivo francés tomaron hoy por cuarto sábado consecutivo las calles del país con las manifestaciones más numerosas hasta la fecha.
El recuento del Ministerio del Interior precisó que hubo 237.000 manifestantes en toda Francia que ha ido creciendo semana tras semana. Así, unas 204.000 personas habían protestado el pasado sábado, 31 de julio, frente a las 161.000 de la semana anterior o las 110.000 del día 17.
Desde el 21 de julio ese documento que certifica tener la pauta de vacunación completa o no estar contagiado ya era obligatorio para acceder a los centros culturales, pero desde este lunes, 9 de agosto, su exigencia marcará de forma mucho más amplia el día a día de la población.
El proyecto de ley validado también exige al personal sanitario estar vacunado totalmente como muy tarde para el 15 de octubre, una confluencia de requisitos que desde hace un mes ha canalizado a sus detractores en una oleada de protestas.
MÚLTIPLES PROTESTAS MASIVAS
En toda Francia, 150 ciudades albergaron manifestaciones. «Somos ciudadanos responsables, absolutamente comprometidos en la defensa de nuestros derechos fundamentales y de nuestras libertades. Somos irreprochables, estamos unidos y sin etiquetas políticas», señaló hoy la coordinadora de uno de los cortejos parisinos, Sophie Tissier, del colectivo Paris pour la Liberté.
El movimiento encadena de momento cuatro sábados consecutivos, pero no tiene fecha de caducidad. «Esta lucha va a continuar. Confío en que en septiembre, cuando todo el mundo haya vuelto de las vacaciones, haya más gente», afirmó Franck, ingeniero de 51 años. El certificado sanitario, en su opinión, «es liberticida y erosiona el pacto de igualdad.
Mientras tanto, Macron se va de vacaciones
Mientras se producen las manifestaciones masivas, Macron se encuentra de vacaciones en la residencia oficial estival de Brégançon, en el sur del país.
Las últimas cifras apuntan que desde el inicio de la campaña de vacunación en diciembre 44,6 millones de ciudadanos han recibido al menos una dosis, el 66,2% de la población total, y 37,1 millones tienen la pauta completa, el 55,1%.
