Según el departamento, sus acciones están “basadas en evidencia de que desarrollaron y suministraron software espía a gobiernos extranjeros”
Más de 50.000 objetivos fueron víctimas de espionaje digital del sistema Pegasus, un software de grado militar desarrollado por la empresa israelí NSO Group y vendido a distintos gobiernos del mundo como herramienta para rastrear a terroristas y delincuentes. Pegasus se instala de manera silenciosa en los teléfonos móviles y permite tener acceso a todos los datos, fotos, direcciones, mensajes de texto y llamadas del usuario vigilado.
Candiru es otra firma que supuestamente desarrolló herramientas utilizadas para espiar a activistas de derechos y otras personas en todo el mundo. Otras entidades incluidas son Positive Technologies, de Rusia, o Computer Security Initiative Consultrancy PTE LTD, con sede en Singapur.