La deuda de las administraciones públicas se incrementó en septiembre en 9.703 millones de euros, hasta alcanzar un nuevo máximo histórico de 1,3 billones de euros, lo que supone el 114,1% del PIB -la previsión del Gobierno para el conjunto de este año es del 118,8%-. Según los datos publicados hoy por el Banco de España, el volumen de deuda pública se incrementó un 0,7% en septiembre respecto a agosto. En una comparativa con la situación que se vivía en septiembre de 2019, la deuda pública repuntó un 8,7%, lo que se traduce en 104.618 millones más.
Este incremento de la deuda se debe principalmente a un nuevo aumento del endeudamiento en el Estado y la Seguridad Social, que siguen afrontando un esfuerzo extra de gasto debido al impacto de la crisis del coronavirus. Por su parte, las comunidades autónomas y las corporaciones locales, gracias a las transferencias del Estado para hacer frente a la crisis, siguen fuera de los números rojos parciales -los que atañen a un mes- y redujeron unas décimas endeudamiento respecto a agosto.
La deuda pública cerró 2019 en 1,18 billones, el equivalente al 95,5% del PIB, por debajo del objetivo que se había marcado el Gobierno del 95,9% del PIB. Para este año el Gobierno fijó una meta de reducción hasta el 94,65% del PIB, que sin embargo, como consecuencia de la crisis del coronavirus el Ministerio de Asuntos Económicos se vio forzado a actualizar, hasta elevarse la estimación al 118,8% del PIB, con una previsión del 117,4% del PIB el próximo ejercicio, apenas un 1,4% menos.
Lo que más preocupa es la deuda del Estado. En septiembre se elevó un 0,9% respecto al mes anterior al sumar 10.106 millones a su agujero en apenas 30 días, hasta los 1.171.504 billones de euros, lo que es un nuevo récord histórico, el enésimo consecutivo. Respecto al año anterior repuntó un 10%, sumando 107.045 millones en los últimos 12 meses.
El otro gran agujero de la caja pública lo tiene abierto la Seguridad Social, que tras elevar su desajuste un 3% intermensual, marcó también marca histórica, con 2.250 millones más, hasta los 74.855 millones de euros. Las cifras son aún más estremecedoras si se comparan a nivel interanual, al crecer los números rojos un 42,7%, o lo que es lo mismo, 21.412 millones más de deuda en solo un año. Dos causas principales marcan la mala evolución de sus cuentas: los préstamos concedidos por el Estado para garantizar el pago de las pensiones, cuya factura mensual supera actualmente los 9.800 millones de euros y la transferencia de 18.396 millones consignada para el próximo año, destinada a cubrir 1,7 puntos de su déficit, quedando la referencia de déficit en el 5,2%.
Por su parte, la deuda pública de las comunidades autónomas se redujo ligeramente en septiembre, con un descenso respecto a agosto de 730 millones de euros, un 0,2% menos, hasta los 301.959 millones. Eso sí, no hay que perder de vista que en el último año la deuda regional ha crecido un 1,3%, añadiendo 3.881 millones de euros a su debe. En cuanto a las corporaciones locales, mantienen su buena evolución y gestión controlada pese a la crisis y rebajaron un 1,9% su deuda en el noveno mes del año, con una caída de 696 millones, hasta los 23.861 millones de euros, y a nivel interanual se reduce un 5,5%.
(Javier de Antonio. Diario La Razón)