Fuentes diplomáticas del régimen bolivariano afirman que se buscará aumentar la presión contra la ministra de Asuntos Exteriores por su respaldo a la diáspora venezolana.
Nicolás Maduro quiere aumentar aún más la presión en contra de Arancha González Laya tras su visita a la frontera de Venezuela y Colombia.
La ministra de Asuntos Exteriores visitó el país latinoamericano a pesar de las amenazas del régimen chavista, así como de las presiones de la extrema izquierda. Una situación que alcanzó su punto más álgido cuando Maduro solicitó «revisar a fondo» las relaciones con España.
Sin embargo, ahora el chavismo quiere llevar la ‘batalla’ más allá: hasta el interior de la política española.
Fuentes de la Embajada chavista de Venezuela en España adelantan a Periodista Digital que: “Nicolás Maduro está moviendo sus hilos dentro de España. Está presionando para que Unidas Podemos busque la fórmula para increpar a González Laya y que se distancie aún más de Juan Guaidó u cualquier otra figura incómoda para el chavismo”.
“Están manejando todo con mucha precaución, pero quieren dar un buen regaño a Laya para que le baje dos (se tranquilice) con el tema de Venezuela”, agregan.
Una afirmación que coincidiría con las recientes críticas de Izquierda Unida y del Partido Comunista de España en contra de la visita de la Ministra de Asuntos Exteriores.
El formación dirigida por el ministro de Consumo, Alberto Garzón, criticó que González Laya no hablase con el régimen chavista durante su visita.
La portavoz de la dirección federal de IU, Sira Rego, recalcó que les «sorprende muchísimo» que no hubiera conversaciones con el ejecutivo venezolano al respecto y ha lamentado la «asimetría» que existe a la hora de la exigencia en materia de derechos humanos a determinados países.
Adoptando el discurso del chavismo, Rego insistió en que se pone el foco en determinados conflictos que tienen que ver con el control de determinados «recursos del plantea» y posiciones de «geopolítica».
Por ello, la portavoz de IU ha defendido ser más exigentes con Colombia y la falta de desarrollo de los acuerdos de paz suscritos en su día con la banda terrorista FARC.
Sin embargo, la portavoz de la dirección federal de IU no fue la única que saltó a “increpar” a González Laya.
El secretario general del PCE y exabogado de las FARC, Enrique Santiago, calificó de «provocación» o «grave error diplomático» la visita de González Laya, a la frontera entre ambos países.
Por otro lado, ha recordado que en breve comienza a rodar la comisión de investigación sobre el dispositivo FRONTEX en el ámbito de la Unión Europea para esclarecer el «escándalo» de la vulneración de derechos en la frontera grecoturca.
En este sentido, ha apuntado que existe una misión de FRONTEX desplegada en Canarias, que atraviesa una situación «extraordinariamente grave» con la llegada de migrantes, muchos en situación de vulnerabilidad. Por ello, Rego ha considerado que es «imprescindible» poner «luz y taquígrafos» a la actuación de este organismo.
Justamente, los mismos argumentos vendidos por el régimen chavista para atacar tanto a la Ministra como a la política internacional de España.
Tensión en Madrid
Ante las olas de críticas de la extrema izquierda y el incremento en el tono beligerante del régimen chavista, la secretaria de Estado de Asuntos Exteriores y para Iberoamérica y el Caribe, Cristina Gallach, se reunió este lunes «a iniciativa propia» con el representante del Gobierno de Nicolás Maduro en Madrid.
Europa Press precisa que Gallach ha trasladado al encargado de negocios venezolano, Mauricio Rodríguez Gelfenstein, la «decepción» del Gobierno por la expulsión de la embajadora de la UE en Caracas decidida la semana pasada.
Asimismo, la secretaria de Estado ha aprovechado para indicarle que actuaciones como esa o las declaraciones de Maduro tras la visita de la ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, a la frontera entre Colombia y Venezuela «no favorecen que pueda concretarse el interés de España y de la Unión Europea de ser actores constructivos en la salida de la crisis».
Según las fuentes de la Embajada chavista de Venezuela, «la presión contra la ministra acaba de comenzar. Se empezará una larga cruzada que buscará su desgaste y ganar tiempo para quitar las sanciones de la UE y reforzar al régimen»
(Juan Antonio Puglisi. Periodista Digital)