Avance de la cultura de la muerte: El Parlamento Europeo pide declarar el aborto libre como un “derecho” fundamental

Share on facebook
Share on twitter
Share on linkedin
Así avanza el rodillo ideológico en Europa. Como en España, esta cruzada ideológica y sectaria avanza inexorablemente en Europa. Pese a que en la mayoría de los países del continente el aborto es legal, el Pleno del Parlamento Europeo (PE) ha aprobado una resolución que pide incluir un supuesto “derecho al aborto” en la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea, como respuesta a la decisión del Tribunal Supremo de los Estados Unidos de revocar la sentencia Roe vs Wade y para instar a los países miembros a eliminar cualquier obstáculo en el acceso al aborto.
Por 324 votos a favor, 155 en contra y 38 abstenciones, la cámara de representación europea insta a añadir un nuevo artículo sobre el “derecho” al aborto que establezca que “toda persona tiene derecho a un aborto legal y seguro”.
Y es que con un Parlamento desencadenado y una Comisión sin personalidad que se deja llevar por las corrientes ideológicas el rodillo está bien engrasado.

Efecto de la sentencia del Tribunal Supremo de los Estados Unidos

La fundamentación de esta resolución muestra el temor de los partidarios del aborto por las consecuencias de la histórica sentencia del Tribunal Supremo de los Estados Unidos el pasado 24 de junio.

Miedo al movimiento provida

Los impulsores del aborto como “derecho fundamental” en el Europarlamento también muestran que su iniciativa está motivada por el miedo al reconocer que “la anulación de Roe vs Wade podría envalentonar al movimiento contra el aborto en la Unión Europea”.

En este sentido, enumera las circunstancias especialmente ventajosas para la protección del derecho a la vida en diferentes naciones como Polonia, Malta, Eslovaquia o Hungría.

No es vinculante

Por otro lado, la iniciativa aprobada por el Parlamento Europeo, que no tiene carácter vinculante, reclama a la Unión Europea y a sus Estados miembros “que reconozcan legalmente el aborto y defiendan el respeto del derecho a una aborto seguro y legal”.

También pide a la Unión Europea que “ejerza presión” en los foros internacionales y que abandere el “derecho” al aborto como “una prioridad clave en las negociaciones en el seno de las instituciones internacionales”.

La consejera principal de la organización Alliance Defending Freedom (ADF) internacional en Bruselas, Adina Portatu explica que la resolución no es vinculante. En este sentido, subraya que “cada gobierno tiene el derecho soberano de proteger a los más vulnerables en sus países: los que están en el útero. Las mujeres merecen algo mejor que el aborto”. Portatu denuncia que se trata de un “intento radical” para presionar a los países miembros a que adopten “un régimen extremo (aborto sin límite durante los nueve meses de embarazo).

Para María Menéndez, presidente de la Asociación de Familias Numerosas de Madrid, «Es una aberración el derecho al aborto. Pero es más perverso reforzar la tesis de defensa de ese derecho por miedo a que los provida ganen adeptos gracias a la revocación de la sentencia de Roe vs Wade. Está claro que hay un plan promuerte, desde el inicio de la vida, convirtiendo el lugar más seguro para la vida en el sitio más peligroso.
No tratan de proteger a la madre sino de actuar como dioses creando derechos que van contra las personas. La madre y el niño. Pero sobre todo la vida del niño que es el centro de este derecho. Porque sin matar al niño no habría derecho de la madre.
Por miedo a perder este supuesto derecho, Europa se quiere blindar. Se protege de la vida. Lamentaremos no haber luchado públicamente cuando aún se puede. Todavía los acuerdos de la UE no vinculan a cada país miembro. ¿Esperaremos a que lo sean para llorar que no pudimos hacer nada?»

Por su parte, Polonia Castellanos, presidente de la Asociación de Abogados Cristianos, «es una intromisión ilegítima en el ordenamiento interno de los estados además de colaborar con el negocio del aborto y tratar de imponer un crimen execrable»

Por último, el presidente del Instituto de Política Familiar (IPF), Mariano Martínez-Aedo,  ha señalado, «Es un escándalo que el Parlamento Europeo haga una resolución en un tema sobre el que no es competente para presionar en favor del aborto. Es necesario que los países reaccionen demandando respeto a las normas comunitarias sobre competencias. Y sobre todo, es necesario que la sociedad civil intensifique su lucha a favor de la vida».

(Con información de Aciprensa)

Deja un comentario