El error de Putin y la política española | Pío Moa

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a) Tiene razón porque defiende a Rusia  de la política agresiva de la OTAN. Y la OTAN es Usa más Inglaterra de segunda. La agresión emplea como peón de brega al gobierno ucraniano con su permanente provocación antirrusa. Esta política agresiva ya fue denunciada en su momento por Kissinger, Kennan y otros políticos e intelectuales useños, como un fatal error que abocaría a la guerra. Pero se ha seguido precisamente esa política que provoca la guerra.  El propósito de Usa es mantener a Rusia en la mayor debilidad política y económica posible, arruinarla –lo que  la llevaría de  vuelta al desastre de los años 90 y a una hambruna como la que intentaron imponer a España en los años 40–, y probablemente fracturarla en varios estados, política que han seguido en otras partes. No hay el menor dato que permita creer que Putin pretenda rehacer el imperio ruso o el soviético, y sí lo hay del expansionismo de la OTAN en diversos escenarios. No es Rusia la que rodea a la OTAN de bases militares, sino al contrario.

b) Por otra parte, la desproporción de fuerza es tan gigantesca que no deja a Rusia opciones. Los presupuestos militares de Usa son trece veces superiores a los de Rusia, y con los del resto de la OTAN llegan a dieciocho veces. Solo este dato demuestra quién amenaza a quién. Rusia podría haberse salido con la suya si ganase la guerra en cuestión de días,  cosa que parece alejarse. Mientras, la estrategia de la OTAN consistirá en ayudar a que se prolongue y destrozar económicamente a Rusia. Aun si Rusia lograra  imponerse rápidamente, vendrían después mil problemas. Usa-Inglaterra, es decir, la OTAN, han obtenido victorias rápidas y aplastantes en Irak, Afganistán  o Libia, y casi en Siria. En todos los casos han dejado países destrozados, en guerras civiles y finalmente la OTAN ha perdido esas guerras después de haber provocado cientos de miles de muertos y millones de refugiados. Rusia se enfrentaría a un problema no igual pero sí parecido en Ucrania, aun si ganara enseguida la guerra.

c) Putin ha llevado el desafío demasiado lejos al amenazar  abiertamente con una guerra nuclear que acabaría con Europa, por lo menos. Eso le deja como un peligro general y terrorífico. Claro está que la OTAN tiene  más armas nucleares, y son para algo, Usa ya las usó en la II Guerra Mundial,  pero la amenaza directa con ellas solo puede suscitar la oposición del mundo entero. Por eso casi toda Europa se ha alineado con la OTAN. En mi opinión, es muy posible que el propio Putin sea derrocado en Rusia. Sería quizá la forma más elemental de terminar el conflicto y arreglar lo de Ucrania, suponiendo que los provocadores de Kíef hayan aprendido la lección, y también la OTAN. Claro que por ahora es solo una posibilidad deseable.

d)  Otro punto que nos interesa es el argumento de la democracia empleado por la propaganda OTAN. Se trata de un simple pretexto, como el de las armas de destrucción masiva de Irak. Los problemas políticos de Rusia deben resolverlos los rusos. Y hoy las democracias occidentales avanzan rápidamente a tiranías que por simplificar llamo tiranías lgtbi, impuestas por los medios de manipulación de masas, o Triple M, y por determinadas fuerzas económicas. Por todo ello, España debe adoptar una política  de neutralidad. España debería salir de la OTAN, que no solo no la defiende de nada, sino que invade nuestro país en el punto estratégico clave de Gibraltar, es aliada de Marruecos, que aspira a imitar a Inglaterra con Ceuta y Melilla, y mantiene bases militares ya innecesarias en España. Ni Usa ni Inglaterra ni Marruecos son amigos y aliados de España,  muy al contrario, tienen intereses muy distintos, como demuestra lo que acabo de decir. 

 España supo permanecer neutral en las dos guerras mundiales, y esa tradición debe recuperarse. Un programa político de un partido alternativo debe ponerla sobre la mesa. Junto con un programa cultural contra la colonización. Los dos temas más de fondo en la democracia española: la falta de una política exterior independiente y de una política cultural adecuada a las circunstancias internas y mundiales.

Pío Moa | Escritor

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