«El Bluff de Pedrita la Fantástica en su First Dates con Biden: no sabemos si pudo hablarle algo de economía dada su formación como doctor cum fraude en la materia»
Joe, no quiso tener una segunda cita, ni un beso, ni un abrazo, ni una manita, ni un choque de codo.
Vimos a un cateto, un vendedor de alfombras, un ridículo pretendiente que justificaba una cita de 26 pasos y 29 segundos con argumentaciones sobre políticas bilaterales de Defensa, su gira por «Latinoamérica», la situación migratoria, la agenda progresista y el cambio climático… ¡impresionante!
No sabemos si pudo hablarle algo de economía dada su formación como doctor cum fraude en la materia. Todo un fracasado chuleta de discoteca.
Biden estará mayor pero no es tonto y tiene buena memoria. Era vicepresidente cuando el diplomático ZP sacó las tropas españolas de Kosovo.
El resultado fue, tras la cumbre de Viña del Mar en 2009, un mensaje en el que se relata que Biden «criticó» y «pidió a España que consulte con EEUU antes» de retirar las tropas de otro país y que lo haga «de forma más transparente en el futuro» y en cuanto a la vergonzosa salida de Irak, ZP reconoció que «Tras retirar las tropas de Irak, Bush me llamó para decirme que estaba muy decepcionado».
A Biden le sobraron 25 pasos y 28 segundos para detectar la fiabilidad del doctor cum fraude. Luego hemos podido ver a «Pedrita la fantástica» dándose un minuto y medio para explicar los veinte segundos de «cumbre bilateral» cruzando un pasillo con Biden.
Me viene el recuerdo del momento en que Aznar fue recibido con el público en pie en la Cámara norteamericana, vamos es que no hay color. Pudimos ver al Congreso de EEUU puesto en pie y dando las gracias a España por su apoyo, en la persona de Aznar… Igualito con el dottore cum fraude.
La realidad es que España no estaba en la agenda del presidente norteamericano Biden. En cambio los presidentes de Letonia, Lituania, Estonia o Turquía sí que han podido mantener reuniones bilaterales en las que abordar las alianzas entre los respectivos estados.
Únicamente España, gracias a la torpeza diplomática y a la inexistente además de errática política internacional de Pedro Sánchez iluminada por el social-comunismo, ha quedado marginada y fuera de la agenda de reuniones y discriminada por el resto de los aliados.
Hemos visto a un petimetre buscando que le devolviera la mirada, una interlocución, un comentario, un gesto, algo para poder alardear con la prensa amiga y poder hablar de amistad y sintonía… pero nada.
La conclusión es que, tras cinco meses sin contestar a sus llamadas, hemos sido testigos del desprecio olímpico de Biden a Sánchez quien ha hecho un absoluto ridículo al forzar un más que humillante paseíllo de 20 metros que luego ha desarrollado en una rueda de prensa vomitiva.
