El gobierno viola la Constitución acusando de golpistas a la oposición. El Mundo al revés.
15 de diciembre de 2022. Golpe a las instituciones desde el gobierno. Fecha histórica para recordar lo que nunca debió de ocurrir. La pulsión totalitaria de un gobierno termina imponiendo el asalto al poder judicial por la puerta de atrás. Un 23F con corbata.
Veamos: el gobierno propuso eliminar el delito de sedición con la excusa de la homologación europea. ¿Por qué no se inspiraron en la pena de prisión perpetua de algunos países? Un ‘gratis total’ para los que atentaron gravemente contra la unidad nacional y -según reconocen- ¡lo volverán a hacer! Es decir, garantía de impunidad para los secesionistas. ¿Cabe mayor deslealtad a la nación?
Cabe. Porque cuando creas que has tocado fondo, todavía se puede profundizar. El gobierno decide aprovechar la reforma del Código Penal para eliminar el delito de sedición para abaratar el delito de malversación de fondos públicos. El objetivo es la amnistía encubierta para los golpistas del procés. Pero la realidad es que habrá muchos otros beneficiarios que ‘sí o sí’ verán rebajadas sus penas. Y todos ellos son políticos corruptos. O sea que no sólo hay un gratis total para quien pretende romper la nación sino también para quien mete la mano en la caja de todos. Y todo esto por un gobierno que llegó a la Moncloa con la promesa de limpieza. Paradojas Pedro Sánchez.
Pero es que hay más. De rondón metieron unas enmiendas para tomar al asalto el poder judicial. La primera elimina el examen de idoneidad de los candidatos al Constitucional porque saben que los candidatos propuestos por el gobierno no pasan el examen. Ningún problema: aprobado general. La segunda cambia las mayorías necesarias del CGPJ para los nombramientos rebajando de ⅗ a mayoría simple, evitando el control de la actual mayoría conservadora y rompiendo el espíritu y la letra de la Constitución que forzaba a las fuerzas políticas al consenso.
Ante semejante envite, el PP estuvo ágil y encontró la fórmula para tratar de que el Constitucional evitara el golpe. Y fue entonces cuando los golpistas acusaron a la oposición de pretender un golpe de Estado de togas. El mundo al revés. Se cree el ladrón que todos son de su condición. ‘O jueces o democracia’, argumentan. El mismo relato que el de los golpistas del procés.
Es a la inversa: sin jueces independientes no hay democracia. Con jueces teledirigidos no hay contrapoder al poder y el poder tiende a la autocracia y el totalitarismo. Y evitarlo es lo más democrático que se puede hacer si no queremos una democracia de baja intensidad con tendencia a la ‘venezuelización.
Luis Losada | Periodista
