«Una mentira repetida mil veces se convierte en una verdad«. Esta máxima del nazi Göbbels lo aplica el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a todas horas y sin ningún tipo de rubor.
En una conferencia propagandística en Casa de América de Madrid, y rodeado de los principales empresarios del IBEX, agentes sociales, ministros y dirigentes socialistas, Pedro Sánchez ha sacado pecho de su gestión a lo largo de los últimos meses sin hacer ningún tipo de autocrítica por sus múltiples errores. Y es que en plena crisis por la subida de la electricidad, la evacuación de Afganistán o la pandemia del coronavirus, el jefe del Ejecutivo, después de sus vacaciones en la Mareta, ha presumido de que su Gobierno lo ha hecho todo muy bien.
«España está mucho mejor» dice sin rubor
Sánchez ha hecho un discurso triunfalista de la situación que vive España a día de hoy. «No estamos igual que hace un año, estamos mucho mejor», ha afirmado el presidente socialista alabando que «somos capaces de recuperarnos con rapidez y de hacerlo con justicia social». El líder socialista ha profetizado además que «vamos a superar los niveles prepandemia” para “afrontar los grandes desafíos”.
Hablar pero no actuar
Frente a las críticas por la imparable subida de la luz, que ha revelado la incompetencia del Gobierno para bajar la factura, Sánchez ha defendido que ha «actuado» y seguirá haciéndolo, ha dicho, «para dar respuesta a la demanda social» que es bajar el precio de la electricidad. Propósitos, cuando menos demagógicos, ya que en realidad no hace nada para bajar el precio de la luz porque tiene la posibilidad de reducir los impuestos que gravan la luz en España
El líder del PSOE ha defendido medidas hasta ahora insuficientes como la rebaja del IVA. Pero las actuaciones del Gobierno, ha advertido a sus socios de Podemos, que le reclaman intervenir las empresas del sector -cuyos principales representantes estaban presentes en la conferencia- van a ser “dentro del marco regulatorio europeo”.
En definitiva, más de lo mismo, estamos en el paraíso y quien no se dé cuenta es que es un antipatriota
