El presidente del Gobierno ha optado por resaltar que España es uno de los cinco países de la UE que está diseñando el paquete de sanciones «hipotéticas» que se aplicarían en caso de que, «esperemos no ocurra, haya un conflicto bélico».

En este sentido, ha asegurado que está «en permanente contacto con las instituciones europeas a la hora de responder y compartir información» de los contactos que se mantienen con el resto de país, también Estados Unidos. «Colaboramos con ellos, no tengo nada más que decir», ha zanjado.

Además, no ha querido «adelantar acontecimientos» sobre si España podría brindar apoyo armamentístico a este país.

Por otra parte, preguntado sobre si España podría seguir los pasos de otros países que han optado por enviar armamento y otro material militar a Ucrania, Sánchez ha defendido que «estamos ahora mismo en la diplomacia, en la desescalada, en la disuasión y por tanto no adelantemos más acontecimientos».

Asimismo, ha subrayado que en la reunión extraordinaria mantenida el jueves por los líderes europeos reafirmaron su unidad y «su apuesta decidida por la vía diplomática para desescalar la tensión», al tiempo que reiteraron su «total apoyo a Ucrania en este momento tan difícil que están atravesando».

Así las cosas, tampoco ha querido adelantar «escenarios» sobre qué haría España si finalmente Rusia invade Ucrania y estalla el conflicto. «Esperemos que eso no ocurra», ha acotado, recordando que tanto la UE como Estados Unidos están preparando una «respuesta contundente» si esto se produce.

En definitiva, ni a Biden le importa Sánchez y , por ello, lo ningunea en cuanto puede y además, a la OTAN tampoco le importa el armamento que pudiéramos aportar. Pobre España con este Gobierno