La Asociación Española de Profesionales de los Servicios Funerarios (AESPROF) ha elaborado un informe en el que asegura que el numero de fallecidos por coronavirus en España desde el 14 de marzo hasta el 25 de mayo casi dobla la cifra oficial del Ministerio de Sanidad. Si a 25 de mayo los fallecidos reconocidos eran 28.109 los reales llegan a 43.985, es decir, 15.876 más, un 56,5%. El informe incluye a los fallecidos «sospechosos de covid-19» y tanto en residencias de ancianos, domicilios y centros hospitalarios.
El estudio recoge el trabajo de funerarios, personal de cementerios, personal de registros civiles «de todas las provincias de España», médicos forenses, patólogos e institutos de medicina legal que subrayan «la importancia del anonimato debido a las presiones importantísimas a las que están siendo sometidos«. ¿El gobierno tiene estos datos? Juan Antonio Alguacil, presidente de AESPROF, comenta a Libertad Digital, «imagínate, si nos los han dado a nosotros…».
El propósito de este informe es rendir tributo a todas las víctimas. «Para hacer un luto oficial hay que saber el número de fallecidos que hay. Es muy bonito decir hacemos luto oficial pero si no se cuenta a todos, ¿a quién dejamos fuera?». El 25 de mayo el Ministerio de Salvador Illa eliminó de un plumazo de las cifras oficiales a más de 1.900 muertos. «Los fallecidos no se pueden descontar, uno no es fallecido el lunes y el martes no. Eso está más claro que el agua». Y añade: «Nosotros no entendemos este conteo de fallecidos cuando se sabe positivamente que no es real, las cifras no son reales«.
Alguacil mantuvo hace dos semanas un encuentro telemático con el rey Felipe VI a quien ha remitido el informe. A Presidencia y al Ministerio de Salvador Illa no ha querido. «Decidimos enviarlo solo a Jefatura de Estado porque, ¿para qué vamos a enviarlo a Presidencia y a Sanidad si lo que están haciendo con las cifras oficiales no nos cuadra?». También han enviado a Jefatura de Estado otros tres documentos, uno de ellos «muy importante sobre el tratamiento exacto de los fallecidos por covid durante la pandemia». Este informe no se ha hecho público.
Denuncia la falta de previsión del Gobierno
Volviendo al informe constata datos como que el Centro Nacional de Microbiología del Instituto de Salud Carlos III (ISCII) publicó que el coronavirus entró en España a «mediados de febrero» y «hasta por 15 vías diferentes». Asegura que «ya circulaba en todo su esplendor el 14 de febrero».
El presidente de AESPROF comenta: «Esto ya se sabía, la información científica se conocía. El gobierno multiplicó ni se sabe las veces el contagio. Y si esto se sabía, ¿por qué no se paró? Tan simple como eso, nos habríamos evitado las cifras tan grandes de fallecidos que hay», concluye.
El dossier se pregunta: «¿Qué consecuencias sanitarias tuvo la jornada del 8 de marzo? Para justificar la celebración de la marcha del Día de mujer encabezada por varias ministras, la de Igualdad, Irene Montero, el de Interior, Fernando Grande-Marlaska, o la esposa del presidente, Begoña Gómez, se dio luz verde en toda España a infinidad de actos. El estudio recuerda que el gobierno «a sabiendas y siendo conocedor de la situación que se avecinaba» permitió ese domingo
«la celebración de 480 manifestaciones en toda España (sin contar Cataluña) que reunieron a más de 600.000 personas y ello, pese a que para entonces el coronavirus ya se encontraba propagado por el país y especialmente desbocado en la Comunidad de Madrid, donde hubo 41 manifestaciones que reunieron a 136.430 personas, de las cuales 120.000 en la convocatoria principal, además de los asistentes reunidos en el acto de VOX llegados de toda España».
Recuerda que el mismo Ministerio de Sanidad indicó «que el 23 de marzo los contagios en Madrid se dispararon a 21.531, un aumento del 2.064% con respecto al 8 de marzo». Otros de los «detonantes de la expansión del coronavirus» habría sido el partido de fútbol de Champions League entre Atalanta y Valencia
Los tres primeros pacientes identificados en España se detectaron con muestras tomadas los días 26 y 27 de febrero en Valencia, ciudad a la que regresaron de Milán multitud de aficionados valencianistas tras asistir a dicho juego disputado el 19 de febrero. El encuentro que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), fue una rápida propagación del virus. De hecho, infectó a un 35 por ciento de la plantilla del equipo Valencia. En Valencia fue también donde se registró el primer fallecido con coronavirus de España, un hombre al que le realizaron la prueba después de haber muerto el 13 de febrero y que no tenía ningún vínculo con China.
Las asociaciones funerarias destacan las distintas alertas recibidas —con acuse de recibo— por parte del gobierno de Pedro Sánchez y que fueron ignoradas: la que la OMS realizó «y España firmó en Noviembre de 2019», el «Informe anual sobre preparación mundial para las emergencias sanitarias», el «Informe técnico fechado el 10 de febrero de 2020 realizado por el CCAES «, el «Informe técnico realizado el 3 de marzo de 2020 coordinado por el CCAES y cuyos participantes previnieron de la gravedad de la situación» o el «Informe de 6 de marzo de 2020» realizado por el CCAES. Concluye, «nos hacen ver que los datos manejados de manera oficial no son los correctos y sobre todo en el inicio de la pandemia pese a la alerta de la UE».
Entre toda la información manejada para este estudio hay un informe de Sanidad titulado «Manejo clínico de pacientes con enfermedad por el nuevo SARS-COV-2» fechado del 3 de marzo que denuncian «ha sido borrado de la web del Ministerio».
(Libertad Digital)