Aún cuando no se sabe si Biden se presentará a las presidenciales de 2024, el fracaso más que probable de las intermedias de mañana martes dará argumentos a quienes quieren aplicar una operación ‘renove’ en el Partido Demócrata e impedir que Biden se presente a las próximas elecciones.
Histeria es la palabra que mejor define lo que se está viviendo en la actualidad en las filas demócratas. Y es que en estas elecciones de mitad de mandato se renueva la totalidad del Congreso, una tercera parte del Senado y 36 de los 50 ejecutivos estatales, y los sondeos auguran un verdadero cataclismo electoral para los demócratas y que podrían perder no solo el control del Congreso y el Senado, sino también gran parte del poder a nivel estatal.
Los demócratas podrían perder la Cámara de Representantes
En la Cámara de Representantes, según los sondeos, los republicanos recuperarán el control de la misma y además de forma holgada, dado que aún con 33 escaños muy disputados, los republicanos tendrían prácticamente asegurados 228 congresistas (diez por encima de la mayoría absoluta fijada en 218) por apenas 174 de los demócratas.
El fin de Pelosi
De perder el control de la Cámara, sería con casi total seguridad el final de la carrera política de la presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, quien a sus 82 años difícilmente podría seguir conservando el liderazgo demócrata en la Cámara Baja.
Los demócratas también podrían perder el Senado
En el Senado también los demócratas podrían perder el control de la Cámara, y los republicanos estarían en condiciones de hacerse incluso con 54 escaños, frente a 46 de los izquierdistas. Una mayoría suficiente para bloquear la agenda legislativa del presidente Biden.
Pérdida de Gobiernos estatales
Tampoco a nivel estatal las noticias son buenas para los demócratas, dado que según las encuestas, los republicanos podrían incrementar su poder y hacerse con 31 de los 50 gobiernos estatales.
Los demócratas no solo están a punto de perder elecciones en los Estados clave, sino que incluso están teniendo grandes problemas para mantener la mayoría en algunos de los Estados más progresistas del país, como es el caso de Nueva York o Nuevo México.
Fracaso de Biden
Perder ambas Cámaras sería la peor noticia para el ya muy debilitado y viejo presidente Biden, por cuanto supondría quedar atado de pies y manos durante los dos años de mandato que le restan hasta las presidenciales de 2024.
No cabe duda que el líder demócrata más preocupado por lo que pueda ocurrir el próximo martes es el propio Biden. Y es que, en caso de confirmarse la debacle electoral de su partido, se le atribuirá la exclusiva responsabilidad por ello y dará argumentos a quienes dentro del partido demócrata lo aprovecharían para impedir que se presente en las próximas elecciones presidenciales de 2024.
