Los socialistas defienden en la Comisión de Igualdad una ley que pide a los sanitarios tener en cuenta las necesidades del colectivo LGTBI al mismo nivel que las de las personas con discapacidad o enfermedades crónicas
El Partido Socialista ha defendido este miércoles en la Comisión de Igualdad la Proposición de Ley Integral para la Igualdad de trato y la No Discriminación. Se trata de un proyecto legislativo que, como afirma el propio informe de Moncloa, no pretende aportar nuevos derechos. De hecho, la no discriminación por cualquier motivo ya queda recogida en el artículo 14 de la Constitución Española, que proclama el derecho a la igualdad.
Equipara al colectivo LGTBI con las personas con discapacidad
No obstante, en un intento por ahondar en la protección de los derechos de los colectivos LGTBI a toda costa, el PSOE llega a equiparar al colectivo LGTBI con las personas con discapacidad o enfermedades crónicas. Lo hace en el artículo 13.3, Derecho a la igualdad de trato y no discriminación en la atención sanitaria. A continuación, se reproduce el artículo tal cual está insertado en la norma que el PSOE quiere aprobar: «Las administraciones sanitarias promoverán acciones destinadas a aquellos grupos de población que presenten necesidades sanitarias específicas, tales como, las personas mayores, menores de edad, con discapacidad, pertenecientes al colectivo LGTBI, que padezcan enfermedades mentales, crónicas, raras, degenerativas o en fase terminal, síndromes incapacitantes, portadoras de virus, víctimas de maltrato, personas en situación de sinhogarismo, con problemas de drogodependencia, minorías étnicas, entre otros, y, en general, personas pertenecientes a grupos en riesgo de exclusión, con el fin de asegurar un efectivo acceso y disfrute de los servicios sanitarios de acuerdo con sus necesidades«.
Más allá de la reiteración de los derechos protegidos, la redacción de la norma implica que se estigmatice al colectivo LGTBI como si fuese más propenso a desarrollar determinadas patologías. Se supone que una norma que fomenta la igualdad no puede dar por hecho que la orientación sexual es germen de enfermedades concretas. Además, en cualquier caso, al profesional sanitario le interesa atender a la persona más allá de su orientación sexual o etnia, que es algo que en Medicina resulta secundario.
(Con información de VozPopuli)