El paso previo al despotismo | Francisco Martínez Peñaranda

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“No estoy de acuerdo con lo que dice, pero defenderé con mi vida su derecho a decirlo”

Estas palabras que fueron atribuidas a Voltaire, un ilustrado francmasón, fueron en realidad pronunciadas por otro francmasón  Claude-Adrien Helvétius con el cual tampoco compartimos nada en absoluto, salvo esta frase, y su fuerza y sentido es tan elemental que, de suprimir la libertad de expresión sería y es, el paso previo al despotismo de forma inequívoca.

El día trece de julio del 2022, quien les escribe, tuvo la oportunidad de comparecer en la Comisión Especial de Infancia y Adolescencia en la Asamblea Regional de Murcia, frente a los diputados, cuyos portavoces hicieron sus exposiciones y preguntas al respecto de esta comparecencia.

Pero como dijo acertadamente George Orwell “La libertad de expresión es poder decir lo que la gente no quiere oír”

Y es evidente que estos representantes del pueblo, no quieren oír lo que el pueblo al que representan les quiere decir. Paso previo al DESPOTISMO.

En esta comparecencia, se amonestó por parte de la presidencia al ponente, (un servidor) por tres veces, pero no por formas incorrectas u ofensivas, sino simplemente porque a quien presidía no le gustaba el fondo de lo que allí se decía.

Los argumentos que esgrimió el compareciente, fueron simple y llanamente que las leyes aprobadas por ese cuerpo legislativo de la Asamblea Regional de Murcia en referencia a la Ley 8/2016 del 27 de mayo y 3/2019 del 20 de marzo, son injustas,  leyes feministas y de  derechos de lesbianas, gays, trans, bisexuales e intersexuales y para erradicar la LGTBI fobia. Son injustas y el compareciente se propuso desglosar las razones que sustentan esta afirmación, en la referida ponencia.

Pero resulta, estimado lector, que parece ser que estas leyes no se pueden criticar, no se puede decir que son un mal y una injusticia.

Y si se dice que son una injusticia y que con ellas se hace el mal, pues toda la maquinaria del despotismo reinante se pone en marcha para coartar la libertad de expresión del compareciente y asunto concluido.

Y esta es la tragedia del derecho positivo.

Las leyes raciales de Estados Unidos fueron aprobadas por un parlamento democrático y estuvieron en vigor hasta mediados del siglo XX y no por ser democráticas eran justas, porque iban en contra del derecho natural. Porque discriminaban por razón de raza.

Y fueron criticadas, y la sociedad civil se movilizó y Martin Luther King que se ve ahora como un héroe en la perspectiva del tiempo, entonces era un ilegal censurable y reprobable, y estuvo en la cárcel, porque decía lo que no gustaba.

Las amonestaciones de la presidencia de esta Comisión de la Infancia y la Adolescencia, al ponente,  han sido y son por motivos de fondo y no de formas. Son amonestaciones injustas, simplemente porque a la señora presidente, no le gusta escuchar la crítica a unas leyes que se cuestionan desde la sociedad civil.

Cabe subrayar que en su intervención el representante del grupo parlamentario Vox  respaldó esta libertad de expresión sin paliativos ni ambigüedad,  y que el representante del grupo Ciudadanos mostró también su apoyo a esta libertad con muy buen criterio, con la siguiente frase: “Aunque no comparta lo que usted dice, tiene derecho a decirlo en esta sala”. No quisiera dejar en el tintero a la representante del Partido Popular que dijo una cosa y la contraria como era de esperar y es la costumbre de este partido, costumbre acuñada y forjada durante la última década. Es decir, apoyamos a la familia y aprobamos leyes contra la familia, en fin, lo de siempre, mucha coherencia la del PP,   y en referencia a  los partidos de izquierda ni me molesto en valorar su intervención, mantras, mantras, y más mantras, no diré nada, ya que el totalitarismo es su enseña y su bandera por principio.

En la esperanza  de que en estas comisiones, se puedan cuestionar leyes y criticar actuaciones y no sean un espacio para pasar la mañana y para hacerles la pelota a las instituciones. En el deseo de que se corrija esta deriva despótica escribo hoy.

Sirva esta carta abierta, para reprobar la actuación de la señora Miriam Guardiola, presidente de esta Comisión de la Infancia y la Adolescencia en la Asamblea Regional de Murcia, la cual quedó en evidencia ante miles de personas que siguieron el acto en directo. Y sirva también, para instar al presidente de la Asamblea y a los diputados que representan al pueblo, a que amonesten por la vía reglamentaria a quien ostenta esta presidencia, por cercenar la libertad de expresión de quien tiene derecho a ejercerla.

Quien actúa de este modo no merece ese cargo y esa distinción ya que su actuación ha sido y es el PASO PREVIO AL DESPOTISMO.

Francisco Martínez Peñaranda escribe para usted de vez en cuando. Gracias por atenderme.

 

1 comentario en «El paso previo al despotismo | Francisco Martínez Peñaranda»

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