Cancelación | Alessia Putin

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Alessia Putin es la autora de un libro que acaba de ser publicado y que merece ser tenido en cuenta porque es un terremoto intelectual contra lo políticamente correcto. El título es «Cancelación» y se presenta como un manual contra la dictadura de la ideología, el pensamiento binario y el odio político. Su lectura es necesaria y su difusión urgente, porque es un argumentario bien elaborado contra el odio y contra el fanatismo político de la cultura de cancelación, que es lo que se mueve a sus anchas en los campus americanos y británicos, y que ya ha tenido tristes manifestaciones también en los campus españoles.  Su propuesta es la de la divergencia respetuosa y su mérito es que su enfoque está abierto hacia el pensamiento y el conocimiento, hacia el estudio profundo de los temas, hacia la voluntad del entendimiento, sin complejos, valiente, con ganas.

Abogada, doctora en Derecho y Ciencias Sociales por la UNED, profesora e investigadora de Derecho y de Relaciones Internacionales, afirma que en la sociedad, en general, y en la universidad en especial, hay muy poco coraje a la hora de defender el pensamiento independiente: «Es más fácil instalarse en la corrección política o en las dinámicas de grupo. Desde el punto de vista docente, la universidad española se ha convertido en un cortijo endogámico donde es posible progresar a base de mucho esfuerzo pero con poco valor añadido debido a una burocracia y a un sistema de reconocimiento de méritos kafkiano». La paradoja es que ya son numerosos los casos en que es la propia universidad la que autocancela a sus profesores por motivos ideológicos; unos pocos alumnos irrelevantes pueden más que una cátedra docente.
La dinámica actual es lo público contra lo privado, los empleados contra los empresarios, las mujeres contra los hombres, los ecologistas contra los descalificados como «negacionistas». Explica que el pensamiento binario invade el espacio político-social y ofrece como única solución el victimismo y la revancha. Ese sentimiento irracional es el que invade a la gente cuando habla de política; es esa férrea toma de posición que hace imposible el acercamiento de posturas. «Al final, fuerzan siempre a una íntima y profunda dictadura de la ideología». En sus páginas invita al lector a reflexionar seriamente sobre cuánto malestar más pueden aguantar las sociedades occidentales actuales. Si la cultura se vuelve totalitaria, ante el auge de un sistema autoritario como el chino, la gran pregunta que plantea es si China impondrá su modelo al mundo, en un par de generaciones y si resistirá Occidente a esta conquista económica y social. El debate entre Oriente, entendido como el modelo político-económico chino, y Occidente, entendido como civilización de democracias norteamericanas, oceánicas y europeas, está servido.
La obra está dividida en ocho partes y el epílogo no tiene desperdicio. Los temas que aborda son numerosos y van desde la economía, la crítica al capitalismo, la desigualdad, el mito del cambio climático, las contradicciones de la «economía verde», las narrativas políticas de la identidad y el victimismo, los efectos de la nueva religión «woke», las decisiones ideológicas sobre la economía en la Unión Europea o las líneas rojas de los sectores regulados y la redistribución fiscal. Alerta también contra las fuerzas extremistas y euroescépticas. Su propuesta es una vuelta hacia el realismo, hacia el orden liberal. Plantea posibles soluciones en cuestiones esenciales de lo empresarial, industrial, lo social y lo económico, y destaca las ventajas que tiene Europa ya que es el principal regulador de todo el mundo, es la gran uniformadora, aunque habría que matizar que lo es para lo bueno y para lo malo.
Se pregunta si es posible tender puentes en una sociedad polarizada, cómo se podría salir la sociedad del bloqueo cuando la respuesta ante el que piensa diferente es la llamada al boicot o la cancelación y a dónde conduce el camino de la autocensura en artistas y pensadores. «La autocensura, el miedo a expresar opiniones divergentes o contra la mayoría y la furia de las masas ocultas bajo perfiles –a menudo anónimos− de redes sociales, fomentan la cultura de la cancelación y la ruptura de puentes entre quienes piensan diferente, eliminando cualquier espacio de encuentro posible». El prólogo es de Javier Rupérez y expone que la autora propone una reflexión sobre el mundo que nos rodea y sobre las cosas que, según dicen algunos, deben ser consideradas normas básicas de ilustración y comportamiento. Al hacerlo, y para dar profundidad a la reflexión, describe con claridad a unos y a otros, y argumenta sólidamente las propuestas que deberían ayudar a evitar el convencionalismo y sus peligros». En definitiva, esta obra trata de desmontar, uno a uno, los mitos y los dogmas auspiciados por la tiranía de las minorías, disfrazadas de compasión e igualdad, que solo buscan polarizar y levantar muros.
(Autor: Gabriel Cortina)
Ficha técnica:
Cancelación 
Alessia Putin
Editorial Sekotia
299 páginas
@AlessiaPutin

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