Esto no sería lo más grave, se pueden utilizar las energías menos contaminantes a corto y medio plazo. La mayor basura electrónica se genera en Occidente: son el reciclaje de los RAEE (residuos de aparatos eléctricos y electrónicos). Encontramos computadoras, TV, molinillos, batidoras, paneles fotovoltaicos, lámparas led, frigoríficos, congeladores, lavadoras, baterías de coches híbridos y eléctricos, radios… todos los aparatos que utilizamos. Lo malo es que, como velamos por nuestra ecología, los exportamos a países del tercer mundo. Según la revista Environmental Science & Technology sale 13 veces más caro extraer de la tierra los minerales para fabricar nuevos dispositivos, es decir, lo bueno es recuperarlos a partir de los usados. Desgraciadamente como están en los basureros de los países tercermundistas, vemos a gente, muchos de ellos niños, buscando esos minerales entre la chatarra para sobrevivir. Allí encuentran lo que desechamos, que contiene los elementos que buscan para vender y fabricar otros aparatos; entre ellos están dos de los más utilizados, el litio y el cobalto, altamente nocivos para la salud y que pueden causar la muerte.
Cada año son más los residuos: se estima que en 2021 fueron 50 millones de Tm, y cada año van en aumento. De acuerdo con los datos proporcionados por la ONU, el 80% de la basura tecnológica se encuentra localizada en tierras africanas, la mayor parte, la RAEE; ironías de la vida, da empleo a 300.000 personas, sin contar los niños. No existe ninguna regulación, por lo que se busca sin ninguna protección. Occidente es muy ecológico, lo que no impide que enviemos a otros lugares los desechos. ¿Somos los realmente verdes?
Jacinto Seara | Escritor y Científico